El miedo y la incertidumbre han sido dos de las palabras que en los últimos meses han cobrado gran protagonismo. Del mismo modo, los inicios en la creación de startups y proyectos de emprendimiento acostumbran a ser una explosión de incertidumbre: la definición de una buena propuesta de valor, la validación en el mercado, la búsqueda de inversión…
¿Cómo identificar el miedo?, ¿Qué consecuencias tiene en mi trabajo y con mis compañerxs?, ¿Cómo afrontarlo? Estas son algunas de las preguntas que se abordaron en el taller orientado a las startups de INNOLAB y en colaboración con el PROYECTO PULSIÓN, escuela de aprendizaje de vanguardia en la creación y desarrollo de la valentía como competencia.
El miedo profesional y organizativo
“¿Qué es el miedo para vosotros y vosotras?” Con esta pregunta dieron comienzo al taller Eider Cadierno Amat e Isabel Sánchez Mugarra, con el fin de que cada participante pudiese identificar sus propios miedos como contexto de partida y para poder trabajar en la mejora.
Y es que tal y como nos trasladaron, “cada persona tiene su historia, y les damos una narrativa personal. Aunque vivamos la misma realidad, sentimos de forma diferente ante un estímulo externo y por eso lo expresamos con palabras totalmente diferentes.”
El objetivo de la jornada, dividida en dos sesiones, era tomar conciencia acerca del propio miedo y del miedo de otrxs compañerxs, así como desarrollar competencias para su manejo tanto individual como relacional y mejora en la gestión de los conflictos entre equipos.
A lo largo de ambas sesiones, las startups dialogaron en torno al propio miedo a la hora de emprender e intercambiaron experiencias vividas en sus entornos profesionales. Del mismo modo, abordamos diferentes conceptos que rodean al miedo y que nos afectan en el día a día, aprendiendo a diferenciar entre la angustia, el estrés y el miedo; sentimientos en ocasiones, difíciles de diferenciar e interpretar.
Tras identificar sus causas, analizamos el modo en el que nos enfrentamos a ellos y sus consecuencias en nuestro trabajo. Al fin y al cabo, “Cada emoción viene de una historia personal y las acciones son fruto de nuestros sentimientos”, aseguraban Eider e Isabel.
La valentía como competencia
A través de diferentes dinámicas de trabajo, se generaron diferentes situaciones concretas para la reflexión en las que pudimos analizar y apreciar en la práctica, la realidad tanto profesional como organizativa.
Como punto final, Isabel y Eider dieron algunas de las claves a las startups para aprender de la propia valentía a la hora de emprender:
- Sentir que tenemos miedo
- Identificar a qué obedece
- Tomar conciencia del momento en el que surge
- Preguntarnos qué función cumple
- Comprobar cómo lo afrontamos
- Elegir actuar
- Perseverar
- Reconocer el miedo de compañerxs
Una jornada muy productiva e interesante que esperamos repetir.
Eskerrik asko Eider eta Isabel, por acompañarnos en este workshop tan útil para nuestras startups en el día a día!