Nuestro director Javier Garcinuño participó la pasada semana en la jornada «Innovación abierta como palanca de crecimiento empresarial» organizada por el Diario Montañés en colaboración con Sodercan para Cantabria + Emprendedora. En el evento, que tuvo lugar en el Hotel Sardinero de Santander, se abordó la importancia de compartir conocimiento para el desarrollo del tejido empresarial y el territorio.

Participaron, además de Javier Garcinuño (Hasten Ventures / INNOLAB Bilbao), Maite Fibla (Ship2B) y Alberto Alonso (Impact Hub Donosti).

Más de 70 emprendedores y empresas reflexionan sobre los puentes que unen emprendimiento, innovación abierta e impacto social.

La sesión comenzó con la intervención de Javier Garcinuño, que animó a las empresas a realizar una reflexión estratégica sobre las tendencias futuras y lo que permiten las tecnologías, y en este sentido indicó que “hay que contar con lo que pueden aportar los centros tecnológicos, las universidades y las startups”. Para el ponente, “la innovación abierta es una fuente de inversión de nuestro ecosistema emprendedor y empresarial” y las empresas “deben utilizar las patentes, las investigaciones que están al alcance de las empresas para poder innovar y apostar por la innovación abierta”, añadiendo que es “una cuestión de cultura en la organización, de arriba hacia abajo”. 

Por su parte, Maite Fibla, cofundadora de Ship2Be, fundación para impulsar la economía de impacto, que tiene por objetivo que las empresas no solo busquen su rentabilidad económica, sino que tengan impacto social y medioambiental, explicó que “el 70% de las marcas actuales podrían desaparecer y no iba a importar. Las nuevas generaciones comprarán teniendo en cuenta el impacto social de las marcas”. En su opinión, es importante conocer al usuario, a nuestro cliente al que se quiere llegar, o al que no se quiere perder. Las empresas deben adaptar sus productos y hacerlo de forma sostenible, recomendó a empresas y emprendedores. 

Alberto Alonso explicó las ventajas de establecer flujos externos e internos de conocimiento para obtener el mayor potencial innovador posible y animó a los organismos públicos a impulsar las actuaciones de innovación. Para Alonso “hay que salir del efecto túnel y ver la película a 3 o 5 años”. Hay que recordar que la economía es orgánica. Las empresas nacen, crecen y mueren y hay que ser muy permeables para preparar a las empresas para que pervivan. 

La necesidad de la colaboración de lo público y lo privado fue puesto de manifiesto por los tres ponentes, que abogaron por la importancia precisamente del impulso público para mover a las entidades privadas, empresas y emprendedores.

Garcinuño recordó que INNOLAB Bilbao, cuenta con participación del Ayuntamiento, no aportando fondos, sino como agente dinamizador y aglutinador de iniciativas de innovación y emprendedoras. “No se trata de poner dinero sino de tener un fin común, sin olvidar el fin comercial de las empresas”.

Alonso, por su parte apostó por “la existencia de un acompañamiento muy fuerte de las Administraciones Públicas. Las nuevas empresas y las consolidadas necesitan un entorno favorable y estable para poder realizar innovación y de esta manera podrán tomar las mejores decisiones para sus proyectos”.

La innovación abierta implica la búsqueda del talento y la innovación más allá de los límites internos de las empresas. Cuando se habla de innovación abierta también se hace referencia a la importancia, cada vez más presente en la sociedad actual, de desarrollar nuevos productos y soluciones I+D y de fomentar la evolución digital y la inteligencia colectiva. Ante esta situación, las empresas y corporaciones se han dado cuenta de que no pueden desarrollar todo su potencial innovador mirando solo hacia dentro de sus organizaciones. El cambio en este modelo afecta a todos los procesos de toma de decisión y organizacionales, así como al resultado final, el producto o el servicio que, hasta ahora, se presentaba cerrado (patentes, licencias de uso…).

En este contexto, la innovación abierta representa no solo una oportunidad, sino también un reto para startups y corporaciones, y así lo han entendido buena parte de las corporaciones españolas que, cada vez más, apuestan por la innovación abierta mediante la creación de aceleradoras, incubadoras, fondos corporativos y todo tipo de iniciativas, que faciliten la colaboración con startups para desarrollar su negocio, aprovechando la rapidez y flexibilidad con la que cuentan las empresas jóvenes y de dimensiones reducidas, frente a las grandes corporaciones que son más rígidas y sólidas.

Información ofrecida por Sodercan.